03/09/2021

Volver, es una acción que genera unos sentimientos muy profundos. Da igual a dónde o a qué volvamos. A veces puede generar sentimientos positivos: ganas, ilusión… casi siempre acompañados de grandes recuerdos. En otras ocasiones sin embargo, pueden ser sentimientos negativos: miedos, malos recuerdos… y por qué no, simplemente pereza y no querer volver.

Puede ser un tema profundo, pero en este caso no vamos a sumergirnos, y hablaré sobre la vuelta después de las vacaciones, que es lo que me ha sucedido a mi. Hacía mucho tiempo que no tenía vacaciones de 3 semanas, y a decir verdad, la vuelta me ha costado un poco. Y por otro lado, ha coincidido con la vuelta de nuestra sección «En marcha». Y mira tú por donde, ¡mi turno!

Eso me ha hecho recordad, que hace unos años también fue mi turno en esta época, y que hablé sobre este tema:

Hablé sobre 5 consejos para la vuelta de vacaciones de verano. Repasemos si yo mismo me aplico el cuento.

1. Siempre que sea posible, elige las tareas a realizar

En cierta medida, siempre hay que elegir. Me he encontrado con trabajo amontonado, los no acabados de antes de vacaciones, y los nuevos proyectos que vienen. Y entre todo ello, están los trabajos que no pueden esperar… Y también los que querrías atender pero no llegas.

Digamos… que lo he cumplido a medias.

2. Respeta las pausas en el trabajo

La frecuencia no ha sido tanta. Pero las personas que nos encontremos en la oficina, solemos hacer una pausa en torno a las 11 de la mañana. Y creo que las de esta semana han sido más largas de lo habitual.

Por tanto, digamos… que aquí he cumplido bastante bien.

3. Recuerda que septiembre todavía es verano

El verano está siendo… bastante oscuro en general. Pero es verdad que el final de agosto y el inicio de septiembre (en lo referente al tiempo) nos ha traido algo más de luz. He tenido días de playa, y también días de paseos. He podido estar en alguna que otra terraza, que por cierto hoy en día están muy solicitadas, y sin embargo, no he perdido tiempo haciendo cola para comer pintxos.

Por tanto, digamos… que aquí también he cumplido bastante bien.

4. Después de la jornada laboral, nada mejor que hacer deporte

Lo que es «ir a hacer deporte», no. Pero aprovechando el buen tiempo, ¡estoy haciendo los trayectos al trabajo en bicicleta! Entre ida y vuelta, en torno a una hora todos los días. Incluso hay quien me llama Induraun en la oficina.

¡Algo es algo! Yo por lo menos a gusto con lo realizado.

5. Organiza una escapada para realizarla en las próximas semanas

Aquí sin embargo, no he tenido ni tiempo para pensar sobre ello. Fracaso. Pero bueno, a ver si en las próximas semanas organizamos algo.

Y vuestra vuelta, ¿qué tal?